La neumonía: una infección silenciosa pero presente
La neumonía es una infección de los pulmones causada por una variedad de virus, bacterias, hongos y algunas veces por medicamentos u otros materiales. Puede presentarse en todas las edades y generalmente causa síntomas como tos con flema, dolor en el pecho, fiebre y dificultad para respirar.
¿Cómo se desarrolla la neumonía?
Aunque las bacterias y los virus son los principales responsables de la neumonía, seguramente algunas veces hay otras causas como:
- Gases respirables, como el humo de cigarrillos.
- Inhalar cuerpos extraños.
- La aspiración de líquidos.
- Infecciones del tracto respiratorio.
En personas sanas, el sistema inmunológico del cuerpo generalmente puede combatir la infección, sin embargo, algunas veces la infección se vuelve grave, ya que afecta a un gran número de músculos de los pulmones. En estos casos, la enfermedad puede ser muy peligrosa e incluso causar la muerte.
Prevención y tratamiento de la neumonía
Como prevención, se recomienda practicar los siguientes hábitos:
- Lavarse frecuentemente las manos.
- Evitar toser refrigerios.
- Tomar vacunas antigripales.
- Consultar al médico si tienes síntomas de gripe.
En cuanto a tratamiento, dependiendo de la gravedad de la enfermedad, un médico puede recetar antibióticos para combatir la infección. Además es importante que descanses, tomes bastante líquido para mantenerse hidratado y alimentos ricos en nutrientes para ayudar al organismo.
La neumonía es una enfermedad muy peligrosa
Es importante estar alerta a los síntomas de la neumoníaya que se puede convertir en una afección grave si no se trata a tiempo. Puedes encontrar más información sobre la enfermedad y cómo prevenirla, en la siguiente página web: http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/ency/article/000605